Hace tiempo que descubrí que la inspiración no es aquella musa que va de cama en cama enredándose sólo con quien ella decide, si no más bien, una luz que uno puede encender y apagar casi, casi cuando quiere. Y digo casi porque lo que falta, a veces, es insistencia o disciplina y lo que sobra es miedo. Es necesario encontrar el equilibrio entre ambos, como en cualquier baile, pero cuando se consigue, ella, la escurridiza creatividad, puede ser fiel como perro a su amo.
Hoy me gustaría compartir contigo algunas reflexiones, mas que trucos, sobre la creatividad que me han llevado a un proceso, un despertar, desde casi el inconsciente a una forma consciente de SER y ESTAR en la vida .
Detonadores inconscientes: volando sin miedos
Durante los diez años que viví en Portugal mis días acumularon grandes horas al volante y ese fue el principal detonador – además de la cantidad de experiencias que viví y qué necesitaba expresar. Mientras el lado izquierdo de mi cerebro estaba entretenido conduciendo, el derecho jugaba a inventar, crear y construir historias (sí mamá, iba atenta a la carretera de todos modos). Es curioso como esto no funcionaba igual si no era yo quien conducía. Cocinar y “jardinear” (ocuparme de las plantas) tenía el mismo efecto que conducir.
La música o el cine siempre me han llevado a sentir muchas cosas y eso es suficiente para crear, puede ser una opinión, puede ser la continuación de una historia o el querer contarla de otra forma. Por este motivo siempre he tenido una lista de canciones que despiertan emociones y que me invitan a escribir.
Un lugar público dónde pudiera observar sin ser vista era la excusa perfecta para inventarme la vida de quienes veía, sí, ya sé que soy una entrometida pero no lo puedo evitar. La observación y la empatía me guían la mayoría de las veces. Es algo que mi mente hace en el mismo instante en que mis ojos se cruzan con alguien que me llame mínimamente la atención.
En estos casos mi objetivo surgía de improviso, de forma espontánea y en la mayoría de los casos se quedaba ahí, en mi imaginación. Pero ¿qué ocurría si tenía un objetivo y quería plasmarlo sin saber muy bien cómo? Sentí la necesidad de seducir a la creatividad, quería que se quedase más tiempo a mi lado ¿era pedir mucho?
Disparadores: el arte de empezar conscientemente
La forma en la que yo me acerqué, conscientemente a la creatividad y el cómo potenciarla, fue a través de la escritura. Cuando quería transmitir lo que sentía, compartir alguna visión, o inventar historias que se me pasaban por la cabeza, no podía simplemente quedarme sentada y esperar a que la caprichosa “musa” decidiera colarse en mi cama. Así que me inscribí en talleres de escritura creativa con el objetivo de mejorar la técnica, compartir experiencias y afinar esos resortes que me empujaban a crear. Entonces conocí los disparadores.
La mayor parte de ellos son juegos para asociar palabras o empujarnos a pensar en determinada dirección. Elegir palabras al azar e intentar conectarlas en una historia, preguntarnos cosas imposibles como “qué pasaría si mañana te despertaras y tuvieras alas”, intentar descubrir quien es el personaje de un retrato o recuperar un recuerdo de la infancia o plasmar colores, sabores y emociones a través de un texto.
Los story cubes ¡han sido uno de los mejores regalos que me hayan hecho nunca! Hay muchos más disparadores y muy divertidos, en mi caso me dejo llevar bastante bien por ellos.
Pero sin duda uno de los ejercicios que más me ha ayudado a la hora de crear es el de escribir tres páginas todas las mañanas de forma automática. Se trata de algo que descubrí en este libro, del que te hablaré pronto. También la escritura cronometrada a partir de una palabra o idea puede resultar en algo interesante.
Enlazado con esto, vi algo esta semana que me llamó la atención y confirmó lo que yo descubrí con este tipo de prácticas. Uno de los vídeos que Dolors Reig nos dejó como parte del material del curso en el que participo sobre creatividad, hablaba de que, a la hora de escribir, hay dos elementos que elegantemente están en conflicto. Por un lado los ojos cuidan de la armonía estética, de que sea legible lo que allí está escrito, es conservador y cauteloso, lo quiere todo perfecto y es racional, por el otro la mano, que es radical, quiere escribir rápido, es expresiva, irracional, emotiva, espontánea.
En el próximo post me adentraré en el mundo del bloqueo pero antes me gustaría que compartieras aquí, si te apetece, ¿que te inspira? ¿qué hace que tu mente vuele sin miedos?
¿Seguimos juntos por este viaje a la creatividad?
…a veces…
“Debo andar con el viento y el agua,
abrir ventanas,
echar abajo puertas,
romper muros,
iluminar rincones” (Pablo Neruda)
8 comentarios en «Mis “trucos” para SER creativa (1/3)»
Sentarme y escribir, dejarme llevar, emborronar hojas, desnudarme o vestirme con otra piel…a veces funciona…otras acaba en la basura. Lo que más me funciona es tener la mente abierta y “limpia”.
En ocasiones también me llega a borbotones, como un dictado de una mente más creativa, y sólo tengo que servir de enlace y “parir” ese relato o poema.
Un abrazo fuerte mi amiga creativa
nada habita el silencio, cuando todo calla, una vida nace para albergar mi deseo, esa soy yo ya que preguntas
me encanta….
Querida Tegala, gracias por traernos tus momentos de inspiración, coincido en que lo más facil es que tener la mente limpia y abierta. Y sinceramente a mi me ocurre que estar contigo y en el lugar donde vives es inspiración en estado puro…! Un beso creadora 😉
Hum …jopetasmanuela que poético vienes, así da gusto! Eso es lo que define un buen estado de inspiración y lo demás cuento 😉 Beso!
Pérmiteme el enfoque coach: utiliza todos los disparadores que tengas a mano para empezar a crear, pero no te escondas detrás de excusas para no hacerlo 🙂 Voto por que se añada jardinear al diccionario de la RAE 🙂
Abrazos que se crean entre dos
Gracias por ese enfoque Shubhaa, me gusta mucho! Y lo de jardinear…es que yo no se decirlo de otra forma…jajajaja asi que tu idea me parece fantástica 😀 Otro de esos abrazos tan buenos!
La creatividad es esencial para hacer que los proyectos se desarrollen, pero ¿cómo hacer para no perderla en el momento menos oportuno?
El bloqueo creativo es un episodio crítico que invariablemente afrontan todos los profesionistas. La vida en sus distintas facetas exige nuestra atención y dedicación de diferentes formas, las organizaciones y la vida diaria requieren de un trabajo constante y disciplinado.
Les comparto un artículo con tips para terminar con el bloqueo creativo y surjan las ideas.
http://goo.gl/RtsxPl
Muchas gracias Melissa por tu aporte y bienvenida a Chocolate Bailable! Un abrazo!