Una flor colombiana en Madrid: Mª Isabel Saavedra

♫He perdido antes de cada batalla
quiero confesar que todo lo he vivido
como un huracán rompiendo las amarras
de esta nave loca que no busca puertos…
He  perdido tiempos irrecuperables
y oportunidades para amar de nuevo…
ya mi  corazón lo recogí en pedazos…
mereció la pena vivir de aprendiz…
Pero viví…
sentí  …
aquí..
al fondo de mi ser …♫
(“Pero viví”, Saavedra)

Sublime es una palabra que no recuerdo haber usado nunca. Su-bli-me. De repente aquel día, después de su concierto, supe que había sentido algo tan especial que solo esa palabra se me deshacía en la boca. 

Pero antes de hablarte de este concierto te cuento como conocí a Maria Isabel Saavedra ¿te parece?

En el 2009 tuve la suerte de que Diana me encontrara a través de mi blog. Ella es una mujer entrañable, genuina, con uno de esos corazones que parece que se salen del pecho. Diana, sin apenas conocerme, me envió el primer vídeo de Saavedra y como ella había intuido me conquistó ..me enamoré de su voz, poesía, luz …¡fue amor a primera vista! Como no podía ser de otra forma hablé de ella aquí y desde entonces tenía el sueño de verla en directo y abrazarla.

Ese mismo año, en mi último viaje a Colombia, pude conocer a Diana en persona, compartimos un almuerzo especial, en la sucursal del cielo, charlamos y sentí que yo soy una persona afortunada por haberla conocido. Agradecida, como en cada viaje, regresé feliz pero me quedé con la espinita de ver en directo a Saavedra.

Por fin este año, a principios de septiembre supe que ella estaría en Madrid ¡qué emoción! aunque mi maleta estaba un poco cansada me decidí a hacer un viaje relámpago, que por cierto fue toda una aventura. Su amigo Ignacio Izcaray, desconocido para mi hasta la fecha pero todo un poeta, sensible y cercano,  la invitó a compartir escenario y quienes asistimos al evento tuvimos la suerte de disfrutar de dos almas en concierto. 

Diana ya me lo había dicho, escucharla en directo no tiene nada que ver…cuando ella empieza a cantar, la energía del lugar se transforma, no te puedes quedar indiferente al tono, la potencia y a la vez la suavidad con la que acaricia y sacude ¡remueve todo! Estoy convencida de que además de sangre en las venas lleva lava y se convierte en volcán invadiéndolo todo con su ser. Por eso no tengo más que esa palabra para describirte el momento, su-bli-me…

Su música me llega porque detrás de la voz, del cuerpo y del micrófono, hay un ser en plenitud, un ser que se atreve a ser. Periodista,  escritora, docente universitaria, viajera y poeta sin duda, tiene el don de comunicar desde el amor, la compasión, las emociones más básicas, las dudas…Habla desde ese rincón en el que, intuyo, se ha visto a ella misma con su sombra y su luz, aceptando cada detalle como pieza imprescindible para darle forma a su vida.

Me hubiera encantado disfrutarla más, poder preguntarle mil cosas sobre el taller con el que recorre el mundo, “Donde está la musa”  en el que, a través de su propia experiencia,  explora la inspiración, la transformación, la paz y la creatividad consciente . Como soñar es gratis y hasta aquí me ha servido de mucho, no pierdo la esperanza de que algún día podré participar en ese taller en algún rincón del planeta. Y ya puestos a pedir ojalá la próxima vez la vida nos traiga la dicha de juntarnos las tres y que podamos compartir buenos momentos.

Te dejo con una entrevista y otra aquí y algunos vídeos con su música que envuelve de forma arrolladora como los abrazos que da y la sonrisa con la que recibe, inolvidable ¡Gracias Isabel!

Además por si pudieras verla, el día 19 de Octubre estará en el Gran Teatro de Elche (Alicante)

A veces siento que en otra vida debo haber nacido en Colombia, el país al que siempre quiero volver y que tan buenos momentos me ha regalado. Es increíble la cantidad de personas  que he conocido de allá y que además en muchos casos no se conocen entre ellas, la vida me las ha ido poniendo en el camino como regalos maravillosos.

A veces siento que la música, el arte en cualquiera de sus formas, tiene que servir para eso, para conectar-se, con uno, con los demás, para que nos sintamos tan vivos que nos sacuda, que todo lo demás deje de ser relevante y cuando eso sucede para mi es sublime, la única palabra que se me deshace en la boca. 

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…A veces…

“DE ESO SE TRATA…

de equivocarse…

y de perder el miedo

y no querer salvarse,

de eso se trata la vida misma…

de mil veces errar y luego perdonarse.”

Saavedra